Paso 1: Elige el Formato Correcto
Seleccionar el formato adecuado es crucial para resaltar tus fortalezas. Para estudiantes, el formato cronológico inverso es ideal, ya que pone énfasis en tus estudios y experiencias actuales.
Paso 2: Información de Contacto Esencial
Tu nombre completo, número de teléfono, correo electrónico profesional y, opcionalmente, el enlace a tu perfil de LinkedIn deben estar claramente visibles.
Paso 3: Objetivo Profesional o Resumen
Un breve párrafo donde expreses tus metas, habilidades destacadas y lo que buscas en tu próximo rol. Este es tu momento de mostrar dinamismo y ambición.
Paso 4: Destaca tu Educación
Información que Incluir
- Nombre de la institución, ubicación y fecha de graduación (o fecha prevista).
- Promedio, si es destacado.
- Reconocimientos académicos y otros logros.
Cursos Relevantes
Incluye cursos que sean relevantes para el puesto al que aspiras. Esto demuestra interés y conocimiento en el área.
Paso 5: Experiencia Laboral (si la hay)
Si tienes experiencia laboral, inclúyela de manera que resalte tus habilidades y logros. Usa verbos de acción y cuantifica resultados cuando sea posible.
Paso 6: Habilidades Clave
Enumera habilidades que te hagan destacar y que estén alineadas con el rol que deseas. Pueden ser técnicas, como programación, y habilidades blandas, como liderazgo.
Paso 7: Actividades Extracurriculares
Incluye actividades que muestren tus intereses y habilidades fuera del ámbito académico. Esto puede incluir deportes, voluntariado, clubes, etc.
Paso 8: Cursos Online y Certificaciones
Los cursos online y certificaciones son una gran manera de mostrar tu iniciativa por aprender y adquirir nuevas habilidades. Asegúrate de que sean relevantes para tu carrera o industria.
Paso 9: Referencias
Aunque no siempre se pide en un currículum de estudiante, tener algunas referencias preparadas puede ser útil. Selecciona personas que puedan hablar favorablemente sobre tu ética laboral y habilidades.
Paso 10: Revisión Final
Revisa cuidadosamente tu currículum en busca de errores gramaticales o de formato. Pedir a un mentor o amigo que lo revise puede ofrecer una perspectiva fresca y valiosa.